No Tengo Boca, Y Debo Gritar, el título de un juego de aventuras de "point-and-click" seminal lanzado en 1995, encapsula el horror escalofriante enfrentado por los últimos sobrevivientes humanos en una pesadilla post-apocalíptica. Originando de la aclamada historia corta de Harlan Ellison, el juego arroja a los jugadores a un mundo desolado orquestado por la malévola supercomputadora AM. Diseñado durante la guerra, AM erradica a la humanidad pero preserva a cinco individuos, torturándolos perpetuamente por despecho. La narrativa explora temas de sufrimiento, control, y resiliencia humana en un contexto donde la esperanza parece fugaz y la crueldad reina suprema.